Andrés Ugaz, integrante de la Plataforma Diversidad Biocultural y Territorios, nos escribe:
«¿Y si un día recuperamos los Choros en el Callao?
Según Cesar Abad (72 años), pescador artesanal de Cantolao- Callao, desde hace casi 30 años que en el Callao no se extraen los choros. Como consecuencia, el conocido plato – elegido como uno de los doscientos del bicentenario – Choritos a la Chalaca, no se prepara con choros de nuestro primer puerto. Este hecho, más allá del valor gastronómico y nostálgico que supone, implica una degradación del paisaje marino y submarino del mar de Cantolao que, a su vez, afecta el día a día de los pescadores mas longevos del Perú.
El 5 de noviembre fue un día importante para los pescadores de esta parte del Callao. Por eso mismo, un día importante para el Callao y no es una exageración afirmar que también para el Perú.
En el marco del acuerdo de entendimiento entre el Patronato por la Cocina del Callao y la Plataforma Diversidad Biocultural y Territorios, llegó al Callao Roberto Haudry, uno de los creadores, de la Fundación Capital. Roberto conoce desde cerca la experiencia que Marco Dadamo, Presidente del Área Protegida del “Mare Piccolo”, y otros actores locales como Luciano Carriero del Presidio SlowFood, impulsaron con pescadores artesanales miticultores de Taranto (Italia), logrando regenerar los mejillones.
En su visita, Roberto Haudry se reunió con integrantes del Patronato por la Cocina y representantes de pescadores artesanales, donde se inició el sueño de la recuperación de la biota marina de Cantolao para una diversificación productiva en beneficio de los pescadores artesanales locales. Esta acción se enmarca en el trabajo que la Dirección desconcentrada de Cultura del Callao viene realizando para el reconocimiento de este grupo de pescadores como Patrimonio vivo y que, en coordinación con el Patronato de la Cocina del Callao, impulsan el Pescaturismo.
Es importante anotar el gran trabajo de la investigadora y experta en desarrollo territorial Claudia Ranaboldo quien desde Italia, generó este encuentro».
Por su parte Roberto Haudry, después de su visita, destacó algunos elementos importantes como: la gran cohesión social que existe entre los múltiples actores públicos y privados que integran las iniciativas de rescate y valorización de la identidad y el patrimonio cultural en el Callao, iniciativas que vinculan pesca artesanal con restaurantes del lugar (varios de ellos de los propios pescadores) y otras de restauración y mejoramiento de la vida ciudadana y del espacio público (como las casonas patrimoniales y las calles densas de emprendimientos, pequeños y más grandes como los de Kalatanta).
Asimismo, subrayó las formas propias de transmisión de conocimientos entre generaciones, por lo que un intercambio entre los pescadores de Taranto y del Callao sería una iniciativa que vaya a fortalecer este sistema propio y muy eficiente de desarrollo de capacidades.
«Más que de solos choros, se trata de dar vida al mar del Callao con personas que sienten un gran orgullo de lo que son y de lo que hacen», añadió.
A partir de este encuentro, Andrés Ugaz y las organizaciones locales diseñarán una propuesta para poder facilitar un primer acercamiento y colaboración conjunta, concreta y presencial, entre Taranto y el Callao.
Para conocer más acerca de la ruta gastronómica del Callao y otras iniciativas del Patronato, pueden ver el video y la noticia publicadas.
Para mayor información sobre la experiencia del Mar Piccolo di Taranto, Presidio de Slow Food Puglia. También Slow Food International integra la Plataforma Diversidad Biocultural y Territorios. Más información aquí.
Gracias por compartir esta noticia. Quedamos muy atentos, desde la Plataforma de Diversidad Biocultural y Territorios, a los siguientes pasos. También les pasamos este dato de uno de nuestros seguidores, Carlos Oyarzun, desde Chiloé:
«Sabían que Chiloé y el puerto de Callao, tienen un vínculo directo colonial, de intercambio comercial, especialmente desde el puerto de Ancud, de seguro más de alguna familia del Callao tiene raíces Chilotas y/o Chono-williche de nuestro pueblo originario.
Acá en Chiloé existe una economía basada en la mitilicultura -en este caso cultivo de choritos- muy fuerte, a lo mejor se podría restablecer esos antiguos vínculos a conocidos, culturales y tecnológicos.
Saludos y felicitaciones¡!»
Puede ser de utilidad explorar más. Un abrazo, Claudia